Propulsión eléctrica. La inteligencia le lleva más lejos.
Placer de conducción sin emisiones, y sin restricciones.

Placer de conducción sin emisiones, y sin restricciones.
La propulsión eléctrica sin emisiones directas ofrece la combinación ideal de compatibilidad ambiental, autonomía y placer de conducción. El par motor máximo está disponible desde la puesta en marcha, asegurando una aceleración especialmente potente y progresiva a vehículo parado.
El sistema de propulsión de un automóvil eléctrico con batería está formado por el motor eléctrico, la batería de alto voltaje, la electrónica de potencia y el cargador. La propulsión del vehículo corre a cargo del motor eléctrico que, a su vez, se alimenta de la corriente de la batería de alto voltaje. Esta batería puede recargarse por conexión externa a la red eléctrica, y también por recuperación durante la marcha. Su autonomía es suficiente para emprender cualquier recorrido por ciudad, e incluso por los alrededores.
La movilidad exclusivamente eléctrica permite circular sin emisiones locales, casi sin ruidos y con una sensación de conducción completamente nueva.
Aceleración deportiva, autonomía flexible, atractiva velocidad punta, y todo ello con propulsión eléctrica, avanzada y ecológica. Suena utópico, pero no lo es. El concepto de propulsión eléctrica de Mercedes-Benz, con un motor eléctrico de elevado par y tecnologías inteligentes, ofrece placer de conducción sin restricciones y con cero emisiones.